¿Quién dijo que ir a una boda en invierno no es apetecible? Y es que todo depende, como dicen los gallegos. Y mucha razón llevan. Las bodas en invierno pueden resultar en un primer momento más difíciles por las cuestiones climatológicas, pero si se preparan y organizan con cabeza pueden ser realmente encantadoras, diferentes y muy especiales. Y además, si tienes la suerte de que luzca el sol como en la que estuvo Irantzu este sábado en Pontevedra, mucho mejor.
Irantzu, decidió llevar un precioso vestido de fondo beige con dibujo de encaje en verde, con escote en pico en la espalda. La mejor opción era claramente el recogido para lucir la parte de atrás y le dio un toque especial con una diadema de Tocados Mariana de pétalos verdes. Discreta, sofisticada y elegante. La clave en estas bodas de invierno está sin duda en una buena estola o abrigo de piel como eligió Iranzu porque rematan el conjunto a la perfección y son el mejor aliado contra el frío.
¿Y a ti, te gustan las bodas de invierno?
